Agresión reiterada de menor a su madre
Intervención del Serenazgo de San Juan
En el asentamiento humano INIA, ubicado en el distrito de San Juan, un adolescente de 16 años fue detenido por personal del Serenazgo luego de agredir física y verbalmente a su madre de 59 años. Según la denuncia de la víctima, no es la primera vez que el menor actúa con violencia en el hogar, lo que ha generado temor y preocupación tanto en su familia como en la comunidad vecina.
El incidente ocurrió tras una discusión doméstica, donde el menor, aparentemente con problemas de comportamiento y falta de control emocional, atacó a su progenitora. Vecinos, cansados de presenciar estos episodios repetidamente, alertaron a las autoridades para evitar que la situación escalara a un daño mayor.
Tras la intervención, el adolescente fue conducido a la comisaría 09 de Octubre, donde se registró la denuncia formal. Posteriormente, fue derivado al área de Familia para la evaluación de medidas correctivas y acciones legales conforme a las leyes de protección del menor y la víctima.
Reacción de la comunidad y autoridades
Vecinos del A.H. INIA manifestaron su indignación por la situación, afirmando que esta no es la primera vez que han tenido que intervenir para proteger a la madre agredida. La comunidad exige a la Policía Nacional y al Ministerio de la Mujer que tomen cartas en el asunto, implementando medidas de protección y programas de rehabilitación para el menor.
Este caso refleja una dolorosa realidad en la que padres, madres u otros familiares sufren agresiones por parte de hijos adolescentes que han perdido el respeto y los límites. En muchos casos, estas conductas están asociadas a problemas psicológicos, consumo de drogas, violencia previa en el hogar o falta de orientación adecuada.
La intervención de las autoridades no solo busca sancionar, sino también establecer medidas preventivas, ofreciendo asistencia psicológica y social tanto a la víctima como al menor agresor, con el objetivo de prevenir futuros episodios y restaurar la convivencia familiar.
Análisis legal y social
En el ámbito legal peruano, la agresión a un progenitor constituye un hecho grave que, aun cuando el agresor sea menor de edad, requiere medidas de protección para la víctima y un proceso de rehabilitación para el adolescente. El Código de los Niños y Adolescentes establece procedimientos especiales para abordar este tipo de casos, priorizando la reeducación y el bienestar del menor.
El área de Familia de la Policía Nacional y el Ministerio Público deben coordinar acciones con las defensorías municipales y psicólogos para diseñar un plan de intervención integral. Esto incluye medidas de protección para la madre y sesiones de terapia para el menor agresor, con el fin de restaurar la armonía familiar.
Desde el punto de vista del derecho penal, si bien el menor no puede ser sancionado con penas privativas de libertad como un adulto, sí puede recibir medidas socioeducativas e internamientos temporales en centros especializados cuando la agresión es reiterada y grave.
Contexto y referencias similares
Este no es un caso aislado en el Perú. Diversos informes del Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables (MIMP) destacan que la violencia intrafamiliar ejercida por menores ha ido en aumento, en gran parte por la falta de control parental y la exposición a entornos violentos.
Los vecinos del A.H. INIA recalcaron que han presenciado escenas de gritos, golpes y amenazas en múltiples ocasiones, y que esta vez decidieron actuar para evitar consecuencias fatales. Gracias a su rápida intervención, el Serenazgo pudo controlar la situación y poner a salvo a la madre.
La sociedad necesita impulsar campañas de prevención y orientación familiar, fomentando el respeto y el diálogo, así como programas sociales que brinden asistencia psicológica gratuita a familias en situación de violencia.
““Este caso refleja una dolorosa realidad que muchas familias enfrentan en silencio: la violencia doméstica ejercida por hijos que han perdido el respeto y los límites.””